El Parque Nacional Natural Tayrona se encuentra situado a orillas del Mar Caribe, muy cerca de la ciudad de Santa Marta, en el departamento colombiano de Magdalena. Tayrona fue declarado parque nacional en 1964 (incluyendo en el área protegida una parte terrestre y una parte marina) por su incalculable valor natural y su enorme biodiversidad. Con paisajes de selva salvaje, fotogénicas playas vírgenes y espectaculares arrecifes de coral, el Parque Nacional Tayrona se ha convertido en uno de los principales destinos turísticos del país. Además de su riqueza biológica, el Tayrona tiene también gran valor arqueológico, ya que se encuentra en las tierras donde habitó la ancestral tribu indígena de los Tayronas, que fueron grandes orfebres y alfareros.
Aunque este bonito rincón de Colombia, en las faldas de la colosal Sierra Nevada de Santa Marta, se puede descubrir en tours organizados, en este artículo os contamos cómo visitar el Parque Nacional Natural Tayrona en un sólo día, con mucha información útil (incluyendo cómo llegar, precios, los lugares más interesantes que se deben visitar) y otros consejos para hacer esta excursión con bajo presupuesto y de manera independiente. Eso si, os advertimos que nosotros sudamos bastante aunque la recompensa bien merece el esfuerzo.
CÓMO LLEGAR A TAYRONA >>>
El Parque Nacional Natural Tayrona tiene tres puntos de acceso principales y los tres se encuentran sobre la carretera troncal del Caribe que une Santa Marta (departamento de Magdalena) con Palomino, Riohacha y el resto del departamento de la Guajira.
Palangana: Es el primer acceso que nos encontramos cuando se va desde Santa Marta en dirección norte. Este acceso comunica con un sector del parque al que se recomienda llegar en coche privado, ya que hay que recorrer más de 12 kilómetros (solo ida) por carretera para llegar hasta la ensenada de Neguanje y playa Cristal (o la playa del Muerto) Siendo los paisajes más vírgenes del parque, en este sector no hay servicios disponibles para el turista, por lo que el viaje de manera independiente necesita mucha más logística y creemos que es casi inviable en un solo día.
Colinas de Calabazo: Es la segunda entrada cuando se viaja en dirección hacia La Guajira (a unos 25 kilometros de Santa Marta). Se trata de un pista de tierra que pronto se reduce a camino por la selva. El recorrido va ascendiendo los primeros 4 kilómetros (alcanzando una altura máxima de 438 msnm) para descender al Pueblito Chaimara. Hasta aquí el camino son unos 6 kilómetros. Desde el Pueblito hasta la costa hay varias opciones dependiendo al sector que se quiera visitar: Playa Brava (3.7 km), Playa Nudista (3.2 km) y Cabo de San Juan (2.5 km).
Zaino: Esta es la entrada principal del parque y por lo tanto la mas transitada de todas. El acceso se encuentra a 35 kilómetros desde Santa Marta en dirección a Riohacha (capital de la Guajira), por la troncal del Caribe. Nada más cruzar la puerta de acceso se encuentran minibuses que hacen un recorrido de 3 kilómetros por carretera (3000 COP) hasta el Museo Chaimara, en la zona de Cañaveral. Desde aquí únicamente se puede continuar a pie o en mulas.
Para llegar hasta cualquiera de las tres entradas del parque de manera económica, la mejor opción es el transporte publico. Desde la terminal de autobuses de Santa Marta, salen de manera regular numerosas líneas de flota que hacen el recorrido por la troncal del Caribe. El precio hasta Zaino son 8000 COP y se demora unos 45 minutos. Desde Palomino, el trayecto en dirección sur por la misma troncal, dura poco más de una hora y cuesta 6000 COP. También se puede acceder el parque por mar, desde Taganga, aunque hay que pagar 45000 COP (12.5€) por trayecto.
CUANTO CUESTA ENTRAR AL PARQUE TAYRONA >>>
En noviembre de 2018, el precio de la entrada al Parque Nacional Natural Tayrona para turistas extranjeros era de 51500 COP, en temporada baja. En temporada alta la tarifa de entrada era de 61500 COP. Para turistas nacionales, el precio en temporada baja es de 23000 COP y en temporada alta de 27500 COP. Además el precio del seguro diario obligatorio para turistas no colombianos era de 3500 pesos (1€).
ALGUNOS PRECIOS DENTRO DEL PARQUE >>>
En la zona principal del parque (la que nosotros visitamos) los precios de alojamiento y alimentación son un poco caros, por lo que si queréis visitar Tayrona con poco presupuesto, os recomendamos que llevéis agua abundante y algún alimento. Los precios suelen variar un poco dependiendo del sector, siendo el Cabo de San Juan donde encontramos los precios más elevados de todo el parque nacional.
El rango de precios por dormir una noche en hamaca puede variar desde los 15000 hasta más de 40000 COP, dependiendo del sector y temporada. También hay otros tipos de alojamientos, que van desde alquiler de tiendas de acampada (a partir de 10000 por persona) hasta alojamientos en cabañas de lujo, con precios muy alejados de nuestro presupuesto de mochilero.
El precio de la comida también presenta variaciones. Lo más económico que nosotros encontramos (en temporada baja) fueron arepas de queso por 5000 COP, desayunos por 10000 COP, comidas y cenas a partir de 20000. Por medio litro de agua pueden llegar a pedir más de 5000 pesos, lo mismo que por una cerveza o un coco natural.
RUTA DE UN DÍA POR EL PARQUE NACIONAL TAYRONA >>>
El parque abre sus puertas a las 8 de la mañana y cierra a las 6 de la tarde, por lo que si se quiere visitar el Parque Nacional Natural Tayrona en un solo día (sin pernoctar allí) es recomendable madrugar para estar lo antes posible en la entrada. Además, a esa hora el calor es más llevadero y caminar se hace un poco más fácil.
Tras pagar la entrada y el de seguro obligatorio (54000 COP = 15 €) uno puede caminar los 3 kilómetros iniciales (por carretera asfaltada) o subirse en un colectivo (3000 COP) hasta el Museo Arqueológico Chaimara (cerrado en noviembre de 2018), que se encuentra en la zona de Cañaveral, último lugar al que se llega por carretera y donde ya se encuentran algunos alojamientos. Nosotros decidimos pagar el transporte y llegar más cómodamente al comienzo de la caminata. Aquí, en Cañaveral, se pueden contratar mulas que realizan los trayectos entre los distintos sectores del parque, con tarifas a partir de 15000 COP (para las distancias más cortas).
Cañaveral
El camino peatonal (las mulas siguen caminos alternativos) desde Cañaveral hasta Arrecifes (4 km aproximados) comienza adentrándose por un sendero en la selva, con tramos habilitados con madera, muy bien conservados. A medida que uno se va internando la selva toma fuerza, con tramos de vegetación exuberante y otros en los que se tienen vistas espectaculares del literal rocoso y se camina cerca de la playa de Punta Luna, no accesible ya que es una zona en la que desovan las tortugas. Nosotros en este primer sector tuvimos la suerte de ver unos cuantos monos, muchos lagartos e incluso un capibara. En Arrecifes también encontramos varios alojamientos y establecimientos donde comer. La playa principal aquí es muy bonita pero tampoco está permitido el baño, debido en este caso a las fuertes corrientes.
Camino a la costa
Playa de Punta de Luna
Playa de Punta de Luna
Desde Arrecifes hasta Cabo de San Juan (2.5 km), el camino pasa primero por la playa de Punta de las Gaviotas y luego por la playa de La Piscina, ambas de aguas tranquilas y perfectas para darse un baño o bucear, ya que se encuentran cerca de un arrecife de coral. En La Piscina se puede alquilar equipo de snorkel por 30000 COP (¡carísimo!).
Playa de Punta Gaviotas
Cabo de San Juan es, quizás, el sector más bonito y fotogénico, con dos playas separadas por una pequeña península, en donde se encuentra un mirador y donde uno puede dormir en hamacas. Lo malo de ser un lugar tan bello es que también es el sector más concurrido y con los precios más altos de todo el parque. Si hubiéramos decidido dormir dentro del parque, habríamos preferido hacerlo en otro lugar.
Cabo de San Juan
El mirador del Cabo de San Juan
Camping del Cabo de San Juan
Siguiendo hasta el final la playa oeste del Cabo de San Juan se encuentra un camino casi olvidado que nos lleva en dirección a la playa Nudista (1.2 km). Este camino pasa primero por una pequeña playa virgen, casi desierta y salvaje, en la que nosotros disfrutamos de un segundo chapuzón, alejados de la multitud de las playas del Cabo de San Juan.
Camino de Playa Nudista
Ya refrescados, seguimos nuestra ruta hacia el el Pueblito Chaimara, un poblado indígena situado a unos 268 metros sobre el nivel del mar. Desde Playa Nudista hasta El Pueblito existe un pequeño sendero (3.2 km) olvidado por los turistas, que va ascendiendo progresivamente. Aunque pueda parecer poca la distancia, el calor asfixiante y la humedad de la selva hacen que subir este trayecto sea muy duro, así que no olvidéis llevar bastantes provisiones de agua (nosotros llevamos 4 litros para todo el día y se nos quedaron un poco cortos).
Cuando uno llega al Pueblito Chaimara, desde playa Nudista, no sabe muy bien está llegando a un pueblo indígena, a un yacimiento arqueológico o a un lugar sagrado. Entrando por aquí lo primero que uno se encuentra son las chozas de la pequeña comunidad indígena que aún habita en el parque. Son pocos las viviendas de planta circular que aún están ocupadas (aunque en el pasado llegaron a vivir aquí más de 2000 personas) pero uno se puede dar cuenta del estilo de vida de las tribus locales, descendientes directos de los tayronas. El lugar tiene una energía única y un encanto especial. Además nosotros tuvimos la suerte de no encontrar aquí a ningún turista, por lo que el momento fue aún más profundo y mágico.
Primera choza indígena
Núcleo del Pueblito
Restos arqueológicos del antiguo poblado
Desde el Pueblito salen varios caminos: uno a playa Brava (3.6 km), otro hasta Colinas de Calabazo (6km) y el camino de vuelta hasta Cabo de San Juan (2.5 km) de espectacular belleza y bastante duro incluso bajando, así que no nos queremos imaginar la dureza de hacerlo subiendo. El camino comienza siguiendo una vereda de piedra que parece tener siglos de antigüedad y continua descendiendo por un sendero, por llamarlo de alguna forma, entre piedras graníticas enormes y rodeado por todos lados una selva salvaje y exuberante. Este sector es sin duda el más espectacular pero también el más exigente, así que conviene estar preparado y con energías suficientes. En la bajada nos encontramos con chicos deshidratados y un señor que se había desvanecido presumiblemente por un golpe de calor (y tuvimos que pedir ayuda a los encargados del parque).
Escaleras tayronas
Paisajes del camino de descenso
Ya de vuelta en Cabo de San Juan, tocaba regresar de camino a Cañaveral, donde nos esperaba el colectivo de vuelta hasta la salida de Zaino. Este tramo (6,5 km) se puede realizar en poco menos de una hora y media (a paso bastante rápido). Las recomendaciones del parque son que se abandone el Cabo de San Juan a las 3 de la tarde para llegar con calma hasta Cañaveral antes de las 5, con tiempo suficiente para continuar hasta la salida del parque, que cierra sus puertas a las 6 de la tarde.
Paisajes de selva tropical
En resumen, nosotros caminamos más de 20 kilómetros durante prácticamente todo el día, con pequeñas paradas a reponer fuerzas y un par de baños para refrescarnos. Aunque la distancia no sea tan larga, lo más duro de todo fue el calor y sobre todo la humedad de la selva, por lo que no recomendaríamos esta actividad de un día para los que no están en buena forma física. La opción de entrar por Calabazo quizás sea la mejor, siendo un par de kilómetros más corta y además se subiría al Pueblito al principio de la camina, por la mañana con menos calor, y se regresaría poco a poco por el camino de la costa, en lugar de ir y volver haciendo el mismo recorrido.
Sea como sea, nosotros disfrutamos un montón de nuestra visita de un día al Parque Nacional Natural Tayrona, con poco presupuesto y de manera independiente, ya que el lugar es simplemente espectacular.
Cabo de San Juan en Tayrona