La primera vez que hicimos buceo fue hace tres años cuando viajábamos por el sur de Tailandia, donde sacamos el título con nuestros amigos de Pura Vida Diving. Nada más sumergirnos en el mundo submarino supimos que aquello nos iba a enganchar y lo que al principio iban a ser solo un par de días, se convirtió en una semana de pasión bajo el agua.
Desde entonces no habíamos vuelto a ponernos el neopreno (solo en una pequeña inmersión en Gijón) y durante nuestros viajes, siempre anhelamos poder descubrir también los fondos marinos, buceando entre peces de colores y arrecifes de coral. Sinceramente, la razón de no haberlo hecho antes es porque bucear no es un deporte barato. De hecho, muchas veces, hemos llegado a lugares increíbles (como por ejemplo la costa de Western Australia) en los que bucear es uno de los mayores atractivos y nos tuvimos que quedar con las ganas por motivos de presupuesto. Pero no nos vamos a quejar por esto, bastante afortunados somos de llegar hasta donde llegamos viajando con nuestra mochila.
Antes de comenzar este segundo gran viaje nos habíamos puesto como objetivo volver a bucear y esa es la razón por la que viajamos hasta Taganga, en la costa caribeña de Colombia. Hasta aquí llegábamos atraídos por su fama de ser uno de los lugares más económicos para bucear. Esta singular competición por ser el destino de buceo más barato del mundo la disputan principalmente Koh Tao (en Tailandia), Utila (en Honduras) y Taganga (en Colombia). En este artículo os contamos todo lo que se necesita saber si estas pensando en bucear en Taganga. ¿Nos sumergirnos?
¿Cómo llegar a Taganga?
Taganga es un pequeño pueblo marinero muy cerca de la turística y bulliciosa Santa Marta, desde donde parte el único acceso por carretera hacia la bahía de Taganga. Por lo tanto, para llegar hasta allí no nos queda otra alternativa que viajar primero hasta Santa Marta. Esto no será un problema ya que la capital del departamento de Magdalena comunica por tierra, mar y aire con muchas otras ciudades colombianas.
Desde Santa Marta, encontramos dos opciones para continuar hasta Taganga. La opción más económica (1600 pesos colombianos por persona) es tomar uno de los minibuses azules que recorren la ciudad de Santa Marta con destino a Taganga. Recomendamos hacerlo cerca de la carrera 11, ya que el bus hace un recorrido interminable por Santa Marta antes de dirigirse finalmente a Taganga (nosotros tomamos el autobús justo en la terminal de transportes y tardamos en llegar casi dos horas). La opción más rápida es el taxi, que tiene una tarifa estándar de 12000 COP (menos de 3 euros) y no tarda más de 15 minutos.
Bahía de Taganga
¿Dónde dormir y qué comer en Taganga?
Taganga se está convirtiendo en un destino turístico que cada vez atrae más viajeros, por lo tanto las opciones de alojamiento son abundantes y adecuadas para todos los bolsillos, con precios que oscilan desde unos pocos de miles pesos colombianos (10000 COP) hasta cientos de dólares. Nosotros llegábamos de La Guajira aún renqueantes del famoso “virus” (Carmen incluso tuvo que visitar el hospital de Santa Marta) y por lo tanto buscamos un poco de confort extra por encima de lo económico. Nos alojamos en el hostal Fura y Tena, en habitación privada, con baño y aire acondicionado, por el que pagamos 45000 COP por noche.
Atardecer desde la terraza del Hostal Fura y Tena
Gastronómicamente las opciones de Taganga también son muy amplias. Lógicamente, en un pueblo marinero hay que probar los pescados y mariscos frescos que a diario llegan y se venden en la misma playa. En el Paseo del Puerto (carrera 1) y las calles aledañas se concentran la mayoría de los restaurantes. En las palapas del paseo se encuentran menús económicos (a nosotros nos encantó la palapa nº10, donde tienes un menú de sopa, plato principal de carne y bebida por solo 8000 COP y con pescado por 10000 COP). En la zona izquierda de la playa se encuentran varios restaurantes más lujosos de lo que permite nuestro presupuesto de mochileros. En el mismo paseo también hay muchos puestos de comida rápida (tipo salchipapa, hamburguesas, arepas) y puestos jugos naturales con frutas tropicales (a partir de 3000 COP).
El chinchorro es un arte de pesca que utiliza redes
Langosta fresca por unos 10€
Las palapas / restaurantes del puerto
¿Qué hacer en Taganga?
Además de bucear, la bahía de Taganga atrae a muchos turistas por sus bonitas y tranquilas playas, que ofrecen infinidad de actividades para cada tipo de persona. El snorkel es una de las actividades preferidas de los visitantes ya que a escasos metros se encuentran pequeños arrecifes con multitud de peces.
Hay tours en lancha que llegan incluso hasta el PNN de Tayrona y se pueden alquilar kayaks o surf paddles para llegar a los mejores lugares de snorkel. También hay actividades a motor, como motos de agua y flotadores (tipo salchicha gigante) aunque a nosotros no suelen gustarnos este tipo de actividades ruidosas.
Desde la parte derecha de la playa sale un pequeño sendero que lleva hasta la bonita Playa Grande (por seguridad y precaución este camino no está recomendado después de las 16:30). En Playa Grande hay multitud de restaurantes (más caros que Taganga) y también se pueden contratar todo tipo de actividades. Nosotros alquilamos un par de caretas de snorkel y nos fuimos en kayak a descubrir la costa de la bahía de Taganga.
Playa Grande
Los fines de semana y en temporada alta, Taganga es un lugar bastante animado para los que buscan fiesta. Esto convierte a la carrera 1 en un lugar ruidoso y lleno de gente, por lo que si se anda buscando tranquilidad, conviene no dormir muy cerca de aquí. Desde aquí hacemos un llamamiento a todos los que nos leéis para que en todos nuestros viajes nos comportemos cívicamente, con educación, de manera sostenible y sobre todo que respetemos la naturaleza.
Buceo en Taganga
Pero como decíamos al principio de este artículo, Taganga es uno de los destinos de buceo más baratos del mundo, y esa fue la única razón por la que nosotros llegamos hasta aquí. Solo en Taganga encontramos 14 escuelas acreditadas de buceo recreativo y por lo tanto, la competencia hace que los precios bajen.
Nosotros nos dejamos aconsejar por la administradora del hotel y fuimos directamente a Reef Shepherd (con muy buenas críticas en Tripadvisor). Tras hablar con ellos no tardamos en decidir que haríamos un par de fun dives (buceos recreativos). El precio por persona de dos inmersiones, incluyendo el alquiler de todo equipo, unas fotos, la lancha y un refrigerio fue 150000 COP (unos 43€ en diciembre de 2018). Los cursos de Open Water PADI (la titulación necesaria para bucear internacionalmente) costaban 840000 COP (unos 225€).
Tenemos que reconocer que el buceo en sí mismo no es de los más espectaculares del mundo, aunque nosotros nos divertimos enormemente en las dos inmersiones que hicimos. Además durante la actividad nuestro instructor estuvo en todo momento pendiente de nosotros y fue muy profesional, por lo que podemos recomendar la escuela de buceo Reef Shepherd tanto por su precio como por el desempeño de sus trabajadores. Durante los buceos vimos decenas de corales y un montón de fauna marina tropical, pero sobre todo disfrutamos como peces en el agua mientras nos reencontrábamos con nuestra pasión bajo el mar, sumergidos en las cálidas aguas del mar caribe. ¿Dónde será la próxima? ¿México? Ya veremos.
